Por mucho, uno de los símbolos más usados en el mundo BDSM, tanto por iniciados como por veteranos, y hoy vamos a hablar de ello.
En internet o libros encontraras un collar para todo: castigos, bondage, entrenamiento, adiestramiento, de paseo. Etc. Pero que al final son variaciones de los tres que vamos a analizar hoy.
Collar de Consideración BDSM:
Es uno de los primeros collares que se ofrece a la sumisa, El Dominante lo otorga a una potencial sumisa como muestra de su interés para ir formalizando la relación Dominante – sumisa. La particularidad de este collar es que tiene algún detalle en azul.
Este collar representa una etapa de conocimiento, lo que se busca es analizar la compatibilidad de ambos y en caso de que alguna de las partes decida terminar la relación, la sumisa deberá devolver el collar a su amo, puesto que este lo ha comprado o hecho con sus propias manos.
Collar de entrenamiento BDSM:
Luego del collar de consideración, otorgamos el collar de entrenamiento para formalizar la relación Dominante – Sumisa. En este punto recomiendo fuertemente ya dejar los limites por escrito en un contrato y que sea firmado por ambas partes, en la etapa del collar de consideración los limites pueden estar por escrito o bien, solo dialogados previamente.
¿Se puede otorgar este collar sin dar previamente el de consideración?
La respuesta es sí, si ya conoces a la persona y sientes que hay química o compatibilidad, (aunque no hayan hecho una sesión BDSM previa), puedes otorgarle el collar. Al igual que el anterior, es el Dominante el que lo otorga, pero no es necesario que la sumisa devuelva el collar en caso de finalizar el contrato.
A mi en lo personal me gusta que se dejen el collar, las finalizaciones de relaciones con otras sumisas ha sido más por temas de trabajo (tiempo para sesionar) o bien, porque se han mudado a otras partes donde se hace muy difícil continuar con el entrenamiento. Por lo que el collar se vuelve en un bonito recuerdo de las energías y experiencias compartidas.
Este collar generalmente es de cuero, el diseño es a gusto del Dominante. Yo recomiendo que al menos tenga una argolla para poder jugar fácilmente con cuerdas y equipo de bondage.
Collar de esclava BDSM:
Este se otorga cuando la relación se transforma en Amo – esclava, que es un compromiso mucho mayor en la relación, la aceptación de la sumisa es la muestra de entrega total y voluntaria a su ahora Amo.
Este collar se suele acompañar de marcas en el cuerpo como tatuajes o piercing. Acá podemos encontrar variaciones de materiales como en metal y este collar incluye las marcas o nombre del amo.
Protocolos relacionados al collar:
El Dominante siempre es el que entrega el collar a la sumisa, y es esta la que debe aceptar o no el rol.
Si un Dominante ve a una sumisa/o no puede llegar a hablarle directamente, es una descortesía hacia el otro Dominante y lo único que hará es desprestigiar su reputación frente a la comunidad.
El collar que porta una sumisa es indicativo que ya esta vinculada con otra persona (Su Dominante) y esto es un símbolo de exclusividad.